Turismo Cultural

Pues será verdad lo que oí el otro día en la tele, que el turismo cultural en España va en aumento. Lo digo porque hoy en Tarragona la afluencia a los museos y demás monumentos era considerable, aunque la gente iba por las calles con cara de mala uva, será porque hace fresquito, está nublado y a punto de llover. Vaya, entonces no pueden ir a la playa. Ahora empiezo a entenderlo todo.
Iba yo paseando mientras estos pensamientos me rondaban por la cabeza, cuando se me acercan un par de matrimonios, ya maduritos ambos y me pregunta una señora:
- Oiga, eso de ahí abajo es el anfiteatro.
- Sí señora.
- Pero no hace falta bajar para verlo, con mirar desde aquí es suficiente ¿verdad?
- Pues ...
- Es que a nosotros no nos gustan las piedras, ¿no habrá por aquí un bingo?, me pregunta la otra señora.
- Bingo no, lo que hay es un casino.
- Un casino, ¿donde?¿donde? ¿Estará abierto a estas horas?.
- Está ahí al lado, y sí que está abierto, acabo de ver entrar a unos señores.
- Mire usted, nosotros lo que queremos es pasar un buen rato hasta la hora de comer, un sitio donde no haga frío y si podemos ganar unas perras pues mejor, lo nuestro ya está hecho, ahora que aprieten los de atrás, estos jóvenes de hoy en día que se creen que...
- Perdonen señores, me llaman al móvil, adiós.
Este es uno de los motivos por los que llevo siempre el móvil en modo vibración, cuando la cosa se pone fea, hago que me llaman y corto el rollo.
Por cierto los señores que acompañaban a las mujeres no abrieron la boca. Estarían ahorrando fuerzas para el Casino. Hagan juego señores.